Señoras que van a Nueva Zelanda y se pillan un jetlag del copón
La llegada a Auckland tuvo como protagonista principal el jetlag; no era la primera vez que viajaba con un cambio de hora pero en este caso la diferencia horaria era de once horas, es decir para mi cuerpo eran la una de la mañana pero el reloj marcaba las doce del mediodía. Subí al airport bus y conseguí un descuento de dos dólares por el carnet internacional de estudiante (ese que me hacía falta para el vuelo de Emirates pero que no me pidieron) y el chofer con su micrófono encima del volante se empezó a marcar un speech (palique) [...]