El año pasado después de un largo periplo tuve la suerte de visitar Madagascar y como por motivos ajenos a mi voluntad tuvimos que acortar el viaje por un cambio de fechas tuvimos que acortar las cosas para ver pero no me pude ir de allá sin ver lémures en su habitat natural.
A ciento cincuenta kilómetros de Antanarivo (Tana para los amigos) se encuentra el parque nacional de Andasibe-Mantadia que cuenta con nada menos que once especies de lemures. Para visitarlo hay varias opciones pero nosotros elegimos la «más sencilla» en la reserva natural de Analamazaotra con un centro de visitantes con sus guías autorizados.
Para llegar desde Tana y también para recorrer todo el país es contratar un chofer y si sabes francés te saldrá barato, nosotros compartimos un Nissan Patrol de mi querido conductor Farmer (Dios te cuide amigo) y cobraba unos cincuenta euros al día más gasolina y el tipo era un cachondo aunque ni el hablaba español y mi francés es bastante limitado aunque entiendo.
Que me voy por las ramas para ir de Tana a Andasibe son teoricamente dos horas cortas pero en realidad son casi cuatro, en Madagascar tienen su «hakuna matata» particular que es «mora mora» que traducido al canario sería como «relájate puntal que aquí las cosas son así».
Si eres más aventurero puedes ir en Taxi Brousse que es una furgona en la que en Europa irían nueve personas pero allí van treinta.
Además como eres blanco si el transporte vale por ejemplo un euro vas a pagar cuatro pero eso es parte de «la aventura».
Lo recomendable es dormir cerca del parque como hicimos nosotros en un lugar que se llama Feon’ny Ala (la canción del bosque en malgache) que te sale cinco euros por persona si no quieres baño compartido y sobre doce-quince si quieres tener el baño en la habitación, el baño no era nada del otro jueves pero salir por la mañana y ver estas vistas no tiene precio compadre.
Si vas a la aventura puedes contratar un chofer para que te vaya a buscar al parque y te traiga de nuevo hasta la RN2 (la nacional uno de Madagascar) para volver a Tana o seguir hasta Tamatave.
Nosotros por comodidad hicimos con la guía el circuito Indri 1 en el que te aseguras ver un grupo de lemures Indri y monte virgen, se puede hacer la Indri 2 por un poco más de dinero pero ya eran más horas y nos quedaba un recorrido hasta un sitio mágico del que hablaré dentro de poco en el blog.
La verdad es que no se parecían mucho a los de la película de animación pero eso era porque los Indri son una raza distinta al lemur «standard» y son más cantores/chillones. Tiene gracia que para ver los lémures normales tuviera que ir hace unas semanas al zoo del Bronx.
No hagas como yo y vete bien equipado o por lo menos lleva unos buenos prismáticos a tu viaje a Madagacar que seguro que te serán muy útiles para disfrutar de la fauna y la flora de Madagascar.
Ha pasado más de un año y esta obra de arte todavía me choca.
Después de salir del parque este fue nuestro almuerzo en un guachinche de Madagascar que nos llevó el amigo Farmer por menos de dos euros en la RN2, eso estaba lleno de gente malgache y nosotros los únicos blanquitos, más de los locales IMPOSIBLE.
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